Por Sebastián Cristi A.
Con el paso del tiempo me he dado cuenta que la mayoría de los pequeños negocios se preocupa únicamente de una cosa cuando se trata de redes sociales. Y este objetivo que se persigue permanentemente, sin conseguirlo a pesar de todos los esfuerzos realizados es el TRÁFICO.
Existe un sinnúmero de motivos para utilizar el Social Media (percepción de la marca, atención al cliente, interactuar con los clientes, etc.), pero sin duda lo que más importa a los pequeños y medianos negocios es atraer más visitantes hacia sus sitios Web y blogs, pues es desde ahí donde los pueden convertir en compradores. Lo que antes se hacía por medio de un estudiado trabajo diario mediante el SEO, hoy se ha enfocado en las redes sociales gracias a su amplio alcance y a que el SEO como técnica se está convirtiendo en un “arte” bastante difícil de administrar debido a los constantes cambios y exigencias de Google.
Para ayudarte a identificar por qué tus esfuerzos en Social Media no están entregando los resultados que esperabas, te expongo cinco motivos por los que el marketing en redes sociales no está funcionando para la mayoría. Tengo algunos clientes con los que he comenzado prácticamente desde cero. Les he creado los perfiles en las plataformas sociales más adecuadas para su negocio, y he comenzado a administrar sus cuentas partiendo con CERO fans o seguidores. La parte complicada es que la mayoría de ellos no conoce nada acerca de Social Media y esperan resultados instantáneos traducidos en un alza de ventas. Acostumbran presionarme para que sus perfiles de Facebook generen miles de visitas diarias a su sitio corporativo, y quizá este es el motivo por el que siempre insisto que es bueno educar al cliente, especialmente si él no tiene relación alguna con el mundo del Marketing Online.
Un elemento obvio es que si no tienes una base de seguidores y/o fans suficientemente grande, será imposible que se generen visitas desde tus redes sociales hacia el sitio Web. El Marketing en redes sociales no se trata de un juego de números (aunque en el futuro sí podría serlo), y a pesar de ello es necesario contar con algunos seguidores para poder comenzar a realizar un trabajo eficiente orientado al tráfico.
Algunas teorías manifiestan que el número mágico para poder comenzar a tener engagement es de 1000 seguidores o fans, recién después de conseguir esa cifra es probable poder comenzar a ver algo de tráfico derivado hacia el sitio. Con la actual dinámica que se ve en los muros y timelines de las diferentes plataformas sociales es muy probable que la mayoría de tus actualizaciones se pierdan sin ser vistas por nadie, sobretodo si tus fans siguen a muchas marcas e individuos. Según una publicación de AllFacebook, las actualizaciones que publicas en tu muro dentro de Facebook son vistas, en promedio, por apenas el 10% de tus fans.
Entonces, debes comprender que si tienes 100 fans y que el 100% de ellos son reales y realmente les gusta tu página en esa plataforma, y que ya conoces la mejor hora y día para publicar, solamente el 10% de ellos, es decir 10 personas, verán tus actualizaciones. Asumamos también que eres un excelente redactor de contenidos y títulos, entonces el promedio de clics que puedes lograr según las estadísticas es del 40%. Esto quiere decir que de tus 100 fans, solamente 4 de ellos llegarán a tu sitio Web. Existen por supuesto excepciones, pero la mayoría de las situaciones se rigen por estas cifras.
Vamos al grano, lo primero que debes hacer es enfocarte en la construcción de tu audiencia, porque mientras antes cuentes con una base importante de fans y seguidores, más pronto comenzarás a ver resultados atrayendo tráfico desde tus redes sociales hacia tu sitio Web.
Este es uno de los factores más importantes en lo que se refiere al marketing en redes sociales. Mucha gente olvida el hecho de que ellos necesitan estar en permanente contacto e interacción con sus seguidores y fans, si quieren obtener un tráfico consistente desde las plataformas que utilizan.
Las redes sociales se están convirtiendo día a día en sistemas más inteligentes gracias a todos los datos que reciben y compilan desde los perfiles de sus usuarios. Si publicas una vez en dos semanas, entonces la cantidad de seguidores tiene mucha importancia porque el sistema Edgerank de Facebook probablemente disminuirá tu exposición.
También si los contenidos que publicas son de baja calidad, tus seguidores harán caso omiso a los links, y Facebook tampoco dará relevancia a tus resultados. Por ahora esta mecánica se aplica únicamente a Facebook, pero probablemente se aplicará también en el resto de las plataformas más populares con el mismo sistema u otros similares que midan la relevancia de los autores.
La clave es no decepcionar a los seguidores. Si tienes algo realmente interesante que decir, entonces dilo. De otra forma busca qué decir, pero siempre cuida que realmente sea de interés de tus seguidores, especialmente si dicha información les puede beneficiar. Lo más importante es no presionar a hacer clic en un vínculo mediante engaños, haciendo creer al seguidor que encontrará algo que realmente no es.
Lo que sí se debe considerar importante es la redacción de títulos atractivos e interesantes que lleven a contenidos dentro de tu sitio Web que cumplan con las expectativas ofrecidas por dicho título. Para poder tener un radio de conversión alto, es necesario contar con algunas habilidades y conocimientos de redacción. Cada tweet y actualización debe ser atractivo y luego los contenidos en el sitio deben contener información útil y bien redactada. Solamente de esta forma el seguidor se verá tentado a hacer clic la siguiente vez que vea una de tus actualizaciones. Es importante resaltar que siempre se deben cumplir las expectativas del lector, para esto debes ser creativo y siempre proporcionar contenidos de calidad que cumplan con lo que prometes en las actualizaciones que realizas en Facebook, Twitter, Google+, etc.
Cada plataforma social cuenta con un tipo de audiencia diferente. Si miras en Facebook nadie está interesado en chequear cómo funciona el algoritmo de Edgerank. El motivo es que la gente está en Facebook para interactuar y distraerse, y no para gastar preciosos minutos en conceptos complejos que poco le interesa. En cambio en Twitter, puedes publicar actualizaciones técnicas y probablemente muchos seguidores estarán interesados en esos datos. En LinkedIn esas mismas actualizaciones técnicas podrían llegar a tener un efecto increíble de conversión, ya que se supone que tus contactos están ahí por negocios y pertenecen a tu misma industria, y no para saber qué hiciste el fin de semana con tu gatito.
Los contenidos que mejor se propagan en Facebook son los redactados con humor, aunque en el caso de perfiles de empresa debe ser un humor inteligente, serio y no degradante o discriminatorio. Las fotografías y los videos son los tipos de contenido que mejor funcionan ahí, y se comparten viralmente de forma muy eficiente.
En Twitter es necesario enfocarse en temas que tus seguidores consideran sorprendentes, y aquí entra en juego tu capacidad creativa para redactar frases cortas que llamen poderosamente la atención y digan mucho en 6 u 8 palabras.
En Pinterest, el contenido visual es lo más importante, y debes orientarlo principalmente hacia las mujeres, considerando que el 80% de sus usuarios son precisamente mujeres.
Existen aspectos técnicos que debemos considerar, pues sin ellos es muy difícil observar resultados positivos. Uno de ellos es sin duda la capacidad de efectuar seguimiento para revisar nuestros avances y saber qué tan bien (o mal) lo estamos haciendo. La mayoría de las personas están constantemente “peleando” con las plataformas sociales al ver que no consiguen sus objetivos de tráfico, y la razón es que no saben cómo conseguir esos objetivos. Sin embargo es posible aprender a hacerlo con dos simples métodos:
1) Observa a tu competencia y analiza aquellas actualizaciones que consiguen más “Me Gusta” o retweets, luego intenta replicar su estilo.
2) Revisa tus publicaciones anteriores y descubre cuáles de estas tiene mejor rendimiento, intentando repetir el estilo que utilizaste en ellas, la hora y día de publicación.
El primer método es perfecto, siempre y cuando cuentes con una audiencia similar a la de la cuenta que estás analizando, y que cuentes con la misma “categoría social”. No me refiero con categoría social a la cantidad de dinero que generas o tienes, sino a cómo te catalogan tus seguidores, o la imagen que tienen de ti. Yo podría publicar exactamente el mismo post que ha publicado exitosamente mi competencia, y no obtener ningún resultado. Y el motivo de esto es que el otro usuario tiene un posicionamiento de imagen mucho más fuerte que el mío, consiguiendo los clics que necesita porque la gente confía en él.
Respecto al segundo método, considero que es el mejor pues estarás actuando sobre la base de lo que le gusta a las personas de ti, de lo que haces y de quién eres realmente. Esto te da ventajas frente a la competencia porque construyes tu marca y credibilidad en base a tu propia personalidad y estilo.
Coméntame en @sebastiancristi o en @redsocialmedia cuáles otros factores podrían estar impidiendo que se genere el tráfico que buscas y busquemos juntos soluciones que permitan a tus cuentas sociales convertirse en el mejor motor de atracción de clientes para tu negocio.
Escrito por Sebastián Cristi A. en may 21 2012. Archivado bajo Social Media. Puedes seguir las respuestas de esta entrada por el RSS 2.0. Puedes dejar una respuesta o un trackback a esta entrada